No hace mucho estaba en la iglesia y el padre dijo que aquello que más amamos es lo que más nos hace sufrir, estaba hablando de la realción con Dios, sin embargo yo creo que tiene mucha razón. Para muchos lo que más amamos es la gente a nuestro alrededor y entre toda esa gente la familia es un lazo muy particular, sin importar que tan mala sea la relación es muy díficil romperla, no escogemos nuestra familia y nuestra familia no nos escoge a nosotros. Sufrimos cuando ellos sufren, sus problemas son nuestros problemas, nuestra felicidad está atada a la de ellos, no hay peor decepción que si alguno de ellos nos descepciona, confiamos en ellos, confiamos mucho, generalmente son en quienes más confiamos (después de todo han estado ahí desde siempre), es difícil sobreponerse a un golpe a esa confianza... si ellos fallan quién no? Pero a veces hay que pensar diferente, yo soy la menor de mi familia, y yo estoy m...
Siempre he comido naranjas con sal. Con el tiempo he descubierto que es algo peculiar. Sin embargo no me molesta que ve vean raro, o me digan que estoy loca y a pesar de haber tratado otras formas no cambio la mía. Así que, después de algunos años de vivir lejos de mi pueblo: Naranjo...naranja con sal es un recordatorio de quién soy, de donde vengo, de ser como soy, de que todos vivimos diferente. Y así son los escritos aquí: para mí, para nadie, para los aventureros, para el que quiera leer.